Boulogne sur Mer, .29 de noviembre de 1848.
Exmo. Sr. Capitán general D. Juan Manuel de Rosas.
Mi respetado general y amigo:
En principios de este mes tuve la satisfacción de escribir a usted
felicitándolo por el levantamiento del injusto bloqueo con que
hostilizaban a nuestra patria la Inglaterra y la Francia. Ahora lo
verifico con otro motivo puramente personal. En mediados del presente
mes comunicaron desde París, mi amigo el señor don Manuel de Sarratea y
mi hijo político don Mariano Balcarce, el nombramiento que ha tenido
usted la bondad de hacer a este último como oficial de la Legación
Argentina en Francia, y que estoy seguro desempeñará con honor. Esta
nueva y no prevista prueba de amistad me demuestra cada día más, el
empeño de usted de contribuir a hacer más soportables los males de este
viejo patriota. Gracias; un millón de gracias, mi apreciable general,
por todos sus favores; ahora sólo me resta suplicarle que, en el estado
de mi salud quebrantada y privado de la vista, si las circunstancias me
obligasen a separarme de este país, visto su estado precario, corno
igualmente el del resto de la Europa, permita usted el que dicho mi hijo
me acompañe, pues me sería imposible hacerlo sin su auxilio.
Que goce usted de salud completa, como igualmente el resto de su
familia, que el acierto presida a todo cuanto emprenda, y que sea usted
tan feliz como son los votos de este su reconocido amigo y compatriota.
José de San Martín